En junio de 1832, voluntarios realistas detuvieron en la parroquia de Santa María de Ludrio, en el ayuntamiento actual de Castro de Rei (Lugo), a Andrés Reigosa por encontrarse vestido con ropas de mujer.
Encarcelado en Lugo, primero, y después en Mondoñedo, Andrés fue acusado de conducta sospechosa e investigado acerca de su vida y de la circunstancia de “mudar de su traje natural”. Él dijo “que no sabe por qué motivos se separó de su casa, pues que lo hizo sin conocimiento porque siente ciertos ractos que se lo priva y que en aquel entonces le da por caminar, y que esto le suele durar tres o cuatro días”.
… el acusado declaró que vistió de mujer “porque le dolía la caveza” (…) El acusado añadió que “aunque también tenía en la cabeza un pañuelo de colores, este no se recogiera y que lo cambeó por la gorra de lana que trae puesta, y que si se disfrazó de muger fue por ebitar que le pidesen pasaporte, de que carecía...”
Esta sentencia forma parte del archivo documental del Arquivo do Reino de Galiza, creado en 1775 con el objetivo de salvaguardar los documentos de la Real Audiencia de Galicia, tribunal creado el 3 de agosto de 1480 para la restauración de la justicia en el contexto de la pacificación del Reino de Galicia en tiempos de los Reyes Católicos.
Originalmente, su sede se encontraba en la ciudad de Betanzos pero, en 1936, luego de pasar por otro emplazamiento, se traslada definitivamente a su sede actual en el Jardín de San Carlos, en la ciudad de A Coruña.
Aunque el núcleo de los fondos del Archivo proviene de los procedimientos de la Real Audiencia de Galicia, desde mediados del siglo XIX, ha ido adquiriendo fondos de origen diverso, sobre todo de otras instituciones de ámbito territorial gallego. Por tanto, desempeña el papel de Archivo Histórico para los documentos de la Administración Autonómica y custodia también fondos privados y amplias colecciones de fotografía, cartografía y postales que se remontan al siglo IX.
Este Archivo, al igual que otros de igual calado, es una fuente de vital importancia para la salvaguarda de la historia del territorio gallego, así como de todo aquello que le es propio, como es en este caso la historia de nuestro colectivo y lo que ha significado la diversidad sexual y de género en nuestro país a lo largo de los años. Hablamos del legado, y como tal conservarlo es una tarea primordial que, si no fuese por instituciones como esta, que asumen también la tarea de restaurarlo, se perdería en sótanos húmedos en el mejor de los casos.
Con tal motivo, el pasado miércoles 11 de diciembre la Fundación 26 de Diciembre organizó una visita guiada a las instalaciones del Archivo para que nuestro usuariado pudiese conocer de primera mano los documentos históricos sobre el colectivo LGTBIQ+ en Galicia.
En total pudieron disfrutar de la actividad 16 personas mayores de nuestro colectivo, puesto que las visitas tienen límite de plazas, que, acompañadas por la responsable del Archivo, conocieron las instalaciones y su fondo documental, con especial atención a aquellas colecciones que, de un modo u otro, hablan sobre el colectivo LGTBIQ+.
Para una mayor apreciación de estos legajos se dispuso de una sala donde las asistentes pudieron ojear uno a uno estos documentos y su contenido. Pudimos ver no solo sentencias de personas como Andrés Reigosa, sino algunas otras sobre “actos de invertidos”, “sodomía”, “parricidios” o una carta de un padre solicitando el amparo de reclutamiento de sus hijos por “hermafroditas”.
Y ya para terminar la visita, nos trasladamos al taller de restauración donde una de sus restauradoras nos enseñó todo el proceso de recuperación de una pieza histórica.
*Audiencia Territorial contra Andrés Reigosa por sospechoso y vestir de mujer. Año 1832. Signatura 811-7 del fondo documental de la Real Audiencia de Galicia.
*Los pasaportes, expedidos por las autoridades municipales, y por las militares, constituían un medio de controlar los desplazamientos de la población en una época en la que non existían los documentos de identidad.